La pensión BTC del hombre se encontró en un lugar muy fácil
Foto: fortton/Shutterstock
Según los canales de noticias locales, Rusia se ha incautado de $10 millones, unos €9,8 millones, en Bitcoin (BTC) de un antiguo agente de la ley. El caso contra el hombre en cuestión lleva abierto más de dos años y se trata del mayor caso de soborno de la historia de Rusia.
Confiscación de 103 bitcoins
Marat Tambiev, antiguo empleado del Comité de Investigación de la Federación Rusa (ICRF), fue condenado por aceptar un criptosoborno en 2023. Ahora la agencia de noticias TASS informó que los agentes judiciales rusos han comenzado a confiscar parte del soborno.
Se trata de 103 BTC por valor de $10 millones, que las autoridades rusas obtuvieron a través de la criptocartera de hardware de Tambiev. Según los informes, la cantidad se añadió a los ingresos estatales de Rusia.
Las autoridades accedieron a la cartera de Tambiev porque encontraron las claves secretas al registrar su casa. Curiosamente, se encontraban en su ordenador portátil, en una carpeta llamada «Pensión».
El soborno total supuso mucho más de 103 BTC, lo que representa sólo el 4% de la cantidad total. Tambiev fue condenado por aceptar un total de 2.718 BTC, que en aquel momento valían unos $258 millones. Esto lo convierte en el mayor soborno de la historia de Rusia.
El caso contra Tambiev
En 2022, Tambiev fue detenido y el tribunal concluyó que había recibido miles de BTC de la organización de hackers Infraud Organisation. Al parecer, miembros de este grupo sobornaron a Tambiev a cambio de ayuda en procesos penales y en sus propias causas penales.
En 2023, un tribunal de Moscú ordenó la incautación de 1.032 BTC, por valor de $98 millones. El motivo fue que los ingresos no eran verificables. En octubre pasado, Tambiev también fue condenado a 16 penas de prisión.
La investigación posterior de su caso reveló que Tambiev no fue el único que aceptó sobornos. Otros antiguos empleados del ICRF también participaron en los sobornos y extorsiones de Infraud.
Con los sobornos, los hackers de Infraud consiguieron frenar su procesamiento y también blanquear importantes sumas de dinero, según muestra el informe de TASS. Algunos miembros del grupo de hackers ya fueron condenados a penas de prisión de entre 2,5 y 3,5 años en 2023.