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Desde principios de este mes, se ha producido un leve caos en la comunidad Arbitrum (ARB). Tras una controvertida decisión de la Fundación Arbitrum, la comunidad se puso furiosa. A finales de la semana pasada, la Fundación propuso una solución, pero no parece ser suficiente. Una nueva propuesta quiere devolver a la DAO los 700 millones de tokens ARB que están en el centro de todo el alboroto.
El drama de Arbitrum
¿Qué ha pasado exactamente desde principios de mes? Un breve resumen: hace dos semanas, la Fundación Arbitrum presentó una propuesta, denominada AIP-1, para devolver 750 millones de tokens ARB por valor de unos $1.000 millones al propio equipo. Se sometió a votación y el 70% de la comunidad se opuso a la propuesta.
La Fundación ignoró entonces el resultado y siguió adelante con el plan de mover los millones de tokens. Según ellos, la votación no era vinculante, sino que únicamente pretendía ratificar una decisión ya tomada. La comunidad se indignó.
La Fundación Arbitrum atendió a las críticas y presentó dos nuevas propuestas para restablecer la calma. Una propuesta bloquearía los 700 millones de tokens en un contrato de cuatro años. Solo con la aprobación de la comunidad podrían utilizarse.
Una nueva propuesta
Según algunos, esta solución no es suficiente. Una nueva propuesta (AIP-1.05) quiere que los 700 millones de tokens se devuelvan a la DAO, el órgano descentralizado de toma de decisiones de Arbitrum.
“Se trata de un gesto simbólico para significar que la comunidad gobierna la DAO, no los proveedores de servicios de Arbitrum ni la Fundación”.
En el momento de escribir estas líneas, sin embargo, las opiniones sobre esta propuesta están divididas. Alrededor del 50% de los votantes están de acuerdo y el 48% en contra. El 2% restante votó en blanco. Las “urnas” para la propuesta están abiertas hasta el 15 de abril.