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Elon Musk se ha convertido en los últimos años en un nombre muy discutido dentro del mundo de las criptomonedas. Quien dice crypto, dice Elon Musk. El exitoso empresario es una de las personas más ricas del planeta y un genio en lo que a innovación se refiere. Dentro de la comunidad crypto, las opiniones sobre el multimillonario tecnológico están divididas, pero el hecho de que sea la única influencia dentro del sector es algo que nadie puede ignorar.
Musk y Dogecoin: amor eterno
Musk dio su primer paso dentro de la criptocomunidad en abril de 2019 al expresar en Twitter que dogecoin (DOGE) podría ser su criptomoneda favorita. Desde entonces, Musk se ha convertido en un gran fan de la popular memecoin, que expresa regularmente en sus tweets. Con sus casi 134 millones de seguidores en Twitter, consigue influir siempre en el precio de DOGE.
Dogecoin fue lanzada originalmente en 2013 como una broma por los ingenieros de software Billy Markus y Jackson Palmer. Musk es conocido desde hace tiempo como un fan de los memes, así que en ese sentido, la historia de amor entre Musk y la mayor meme-coin en términos de capitalización de mercado no es del todo inesperada. Durante el anterior mercado alcista, dogecoin llegó a convertirse temporalmente en la tercera criptomoneda por capitalización bursátil, por detrás de las grandes bitcoin (BTC) y ethereum (ETH).
Especialmente durante la anterior carrera alcista, el precio de DOGE reaccionó a menudo de forma violenta como resultado de los tweets, en su mayoría vagos, de Musk. Por tanto, Dogecoin demostró ser una de las historias de éxito del pasado bullrun, gracias en parte al controvertido empresario.
Incluso en el mercado bajista del año pasado, el precio consiguió subir con increíble fuerza después de que Musk adquiriera la plataforma de medios sociales Twitter. De hecho, a finales de octubre, dogecoin subió la friolera de un 170%, cuando los inversores se hicieron ilusiones sobre una posible integración de memecoin en la plataforma.
En junio de 2022, incluso se presentó una demanda contra Musk, alegando que permitió deliberadamente que el precio de DOGE subiera un 36 mil por ciento sólo para hundirlo. Sin embargo, los abogados de Musk quieren ahora que se desestime el caso, ya que afirman que los tweets son «inofensivos y anodinos» y también demasiado vagos para ser calificados de fraudulentos.
La relación un poco extraña entre Musk y Bitcoin
Desde 2021, Musk también ha hablado un poco más sobre Bitcoin. Todo empezó en febrero de 2021, cuando Tesla anunció que había invertido $1.500 millones en bitcoin. Un mes y medio después, el gran fabricante de coches eléctricos incluso empezó a aceptar bitcoin como pago por sus coches en Estados Unidos. Sin embargo, cuando Musk anunció en abril que iba a dejar de realizar pagos en BTC debido a las emisiones de la red Bitcoin, el precio de BTC se desplomó.
Musk también admitió poseer bitcoin, ethereum y dogecoin en 2021. También se dice que el BTC representa la mayor parte de sus tenencias de criptomonedas. Sin embargo, Musk sigue revelando que cree que Dogecoin funciona mejor que Bitcoin.
Influir en el precio del bitcoin es obviamente mucho más difícil que con el dogecoin, debido a la diferencia de capitalización del mercado. Además, es mucho menos probable que Musk haga comentarios sobre BTC, a diferencia de su querida memecoin.
Por lo tanto, la influencia de Musk en el precio del BTC procede sobre todo de sus empresas. Musk ha dicho que Tesla volverá a aceptar BTC como moneda si el 50% del consumo de energía de los mineros de BTC procede de fuentes renovables. Si Tesla empezara a aceptar bitcoin (de nuevo), lo más probable es que esto supusiera un impulso positivo para el precio.