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Durante meses, los medios de comunicación nos han enfrentado a una posible recesión como consecuencia de las agresivas subidas de los tipos de interés por parte del banco central estadounidense. Durante la última década, la economía mundial ha disfrutado de tipos de interés de prácticamente el cero por ciento, lo que ha dado lugar a una gigantesca burbuja de activos; lo que también se conoce como la «burbuja de todo».
Ahora, la cuestión es si esa burbuja implosionará con los actuales tipos de interés del 5% más los ~$95.000 millones mensuales de activos que el banco central estadounidense está liberando de su balance. No hay que olvidar las estrictas políticas del Banco Central Europeo y del Banco de Japón.
Enumerando estos hechos, parece poco realista pensar que saldremos de ésta sin daños financieros.
¿Cuándo llegará la recesión?
Contrariamente a lo que piensan los llamados «permabulls» (personas siempre alcistas), las burbujas financieras no se desinflan lentamente. Pero una vez que estallan, la economía suele hundirse repentinamente y los precios de los activos financieros tardan mucho tiempo en recuperarse. Por ejemplo, cuando estalló la burbuja del DOTCOM en 2000, el Nasdaq 100 estadounidense cayó un 83% hasta su mínimo de 2002.
Hasta ahora, la recesión que todo el mundo predijo no se ha materializado debido a un trío de factores: el efecto retardado de las subidas de los tipos de interés del banco central estadounidense, el desbordamiento de la hucha de ahorros del consumidor estadounidense tras la pandemia del COVID-19 y el miedo de las empresas a despedir gente (porque temen que sea imposible recuperar a esa gente).
La expectativa es que la hucha del consumidor estadounidense esté vacía en octubre, además, varios indicadores apuntan hacia una recesión y vemos que la tasa de desempleo aumenta repentinamente (la semana pasada subió del 3,5 al 3,8%).
En este sentido, la recesión parece cuestión de tiempo.
¿Qué significa esto para el precio del Bitcoin?
Las recesiones suelen ser malas noticias para los activos de riesgo. Bitcoin aún no ha experimentado una recesión real en toda su historia de existencia; pero hay muchas posibilidades de que la cotización de bitcoin reaccione de la misma manera que, por ejemplo, el S&P 500 (véase el gráfico siguiente).
En ese sentido, el aumento de la probabilidad de una recesión no es bueno para los precios de los activos de riesgo, y lo vemos reflejado en el rendimiento del Bitcoin en los últimos meses. Por otro lado, también podemos ver inmediatamente en este gráfico que el mercado (hasta ahora) siempre ha conseguido recuperarse de una recesión; al menos el S&P 500.
Por supuesto, eso no ofrece garantías para el Bitcoin, pero también hay que recordar que las recesiones no son inmediatamente el fin del mundo.
