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Noruega parece estar dispuesta a cerrar sus puertas a los mineros de bitcoin. Una nueva ley ejercerá una presión considerable sobre los centros de datos del país escandinavo.
La nueva ley pretende regular el uso energético de los mineros de criptomonedas, entre otros, y, si es necesario, prohibir determinados centros de datos.
Noruega quiere a los mineros de bitcoin fuera del país
Los ministros noruegos de Energía y Digitalización afirman que el Gobierno quiere a los mineros de criptomonedas fuera del país. Esta nueva ley es un primer paso en este sentido. Esto informa canales de noticias locales.
«La idea es regular la industria para poder excluir ciertos proyectos que no queremos», dijo.
Como resultado de la nueva ley, los centros de datos, incluidos, por tanto, los mineros de criptomonedas, tendrán que registrarse y declarar qué servicios prestan. Esto permitirá a Noruega determinar dónde se gasta la energía.
Aquí se dará preferencia a los proyectos «socialmente útiles». Esto no parece incluir las criptomonedas, según los ministros.
Sin embargo, la razón de esta firme actitud hacia el sector de la crypto-minería es sorprendente. Por ejemplo, la razón citada son las grandes emisiones de carbono.
«[La minería de bitcoin] está asociada a grandes emisiones de gases de efecto invernadero, y es un ejemplo de una industria que no queremos en Noruega. No son bienvenidas en Noruega. Queremos partes serias que sean importantes para la sociedad», declaró el ministro noruego de Energía.
Los planes se enfrentan a fuertes críticas
Sus declaraciones no tardaron en suscitar las críticas de la comunidad bitcoin (BTC). Daniel Batten, experto en el sector de la minería de BTC, dijo lo siguiente al respecto:
«La minería de Bitcoin es sostenible en un 55%. Más que cualquier otra gran industria mundial o estado industrializado».
Además, la energía en Noruega es casi totalmente renovable. Ésta es precisamente la razón por la que el país es atractivo para los mineros de bitcoin. Así, los mineros noruegos no emiten gases de efecto invernadero. En definitiva, los ministros noruegos no parecen haber estudiado los hechos.
Sin embargo, el gobierno noruego parece decidido y sigue adelante con sus planes. Con esto, Noruega va a por Islandia. La primera ministra islandesa también indicó a finales del mes pasado que quiere dejar de apoyar a los mineros de bitcoin. Ella cree que el país tiene mejores usos para su energía.