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El desempleo en EE.UU. aumenta más rápido de lo previsto por la Reserva Federal, el banco central estadounidense.
Esta semana, el presidente de la Fed, Jerome Powell, vuelve a ponerse detrás de su púlpito y se espera que adopte un tono «dovish». Dovish significa que será menos estricto y que probablemente discutirá la posibilidad de recortes más rápidos de los tipos de interés.
En otras palabras, el entorno macroeconómico empieza a ser más positivo para Bitcoin, pero sigue habiendo riesgos.
Un entorno macroeconómico más positivo para Bitcoin
En las últimas semanas, hemos visto cómo la inflación en Estados Unidos descendía de forma bastante repentina. A principios de 2024, aún nos sorprendían cifras de inflación relativamente elevadas, que hacían temer una supuesta segunda oleada de inflación.
Ahora, parece que esos aumentos de la inflación fueron una excepción y que, no obstante, vamos camino del 2,0% deseado por la Reserva Federal.
Así lo confirma la evolución de la tasa de desempleo, que el pasado viernes se situó en el 4,1% en Estados Unidos. Esto la sitúa un 0,1% por encima del 4,0% previsto por la Reserva Federal para finales de 2024.
Así que con esto, la inflación parece estar cayendo al nivel deseado más rápido de lo que se pensaba a medida que la economía de EE.UU. comienza a chisporrotear. Esto permite que los tipos de interés caigan más rápido, lo que es básicamente positivo para Bitcoin. Sin embargo, también hay peligro.
¿Sigue habiendo recesión en Estados Unidos?
Basándonos en la Regla de Sahm, ya no podemos descartar una recesión. Si el desempleo sube al 4,2% en julio, se activa la Regla de Sahm. Se trata de un indicador desarrollado por la economista estadounidense Claudia Sahm y establece que una recesión comienza cuando la media móvil trimestral del desempleo ha subido al menos un 0,5% desde su nivel más bajo en los últimos 12 meses.
En pocas palabras, si la tasa de desempleo aumenta rápidamente en un periodo corto, indica que la economía está entrando o ya está en recesión.
A corto plazo, esta evolución es positiva para la renta variable y el precio de Bitcoin. Al fin y al cabo, esto significa que los tipos de interés pueden bajar más rápidamente, que es exactamente lo que esperan los inversores.
El riesgo, sin embargo, es que se produzca una recesión, lo que es especialmente peligroso para la renta variable. Si la economía entra en recesión, naturalmente amenaza las ventas de las empresas, impidiéndoles cumplir las expectativas y provocando la caída de los precios de las acciones.
En el caso de Bitcoin, está por ver cuál será la reacción exacta. Sin duda, es posible que el inversor medio de Nvidia se pase a Bitcoin para defender sus beneficios.