El Departamento de Justicia de Estados Unidos (DOJ) ha acusado a dos ejecutivos de un distrito escolar de Estados Unidos por razones muy inusuales. Estas personas, el superintendente adjunto y el director de TI de las escuelas, han sido acusados de establecer una operación de minería de criptomonedas dentro de las instalaciones escolares, utilizando los recursos y la electricidad de la escuela para beneficio personal.
El consumo energético de la minería de BTC, a examen
La acusación se produce en un momento en que el consumo de energía de la minería de criptomonedas está siendo objeto de un creciente escrutinio en Estados Unidos. Los dos acusados supuestamente compraron tarjetas gráficas extremadamente caras y las utilizaron, junto con otros recursos escolares, para llevar a cabo la operación de minería.
«Compraron tarjetas gráficas de alta gama y utilizaron estas tarjetas, junto con otras propiedades del distrito escolar y electricidad, para ejecutar una granja de minería de criptomonedas en el distrito escolar».
No está claro cuántas escuelas utilizaron los sospechosos para su operación. Un solo distrito escolar en los Estados Unidos contiene varias escuelas, por lo que tal vez la operación ilegal no se limitaba a una sola ubicación.
El Departamento de Justicia tampoco ha revelado qué criptomoneda minaban los sospechosos.
Fraude y robo
Además de las actividades de minería de criptomonedas no autorizadas, se acusa a los implicados de haber robado entre 1 y 1,5 millones de dólares (en el caso del superintendente adjunto) y entre 250.000 y 300.000 dólares (en el caso del director de TI). Estos cargos, combinados con la minería ilegal de criptomonedas, significan que los dos sospechosos pueden enfrentarse a una fuerte condena.
Este suceso coincide con un movimiento más amplio de los reguladores energéticos de Estados Unidos para cartografiar y controlar el consumo de energía de los mineros de criptomonedas. Recientemente, el Departamento de Energía de Estados Unidos (DOE) exigió a los mineros de criptomonedas que informaran de su consumo de energía, una medida que forma parte de un esfuerzo por frenar el despilfarro energético. En todo el mundo, los reguladores están tomando medidas similares para controlar el creciente consumo de energía asociado a la minería de criptomonedas.