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A principios de esta semana, se podía leer en las crypto noticias que el ex-CEO de la derribada bolsa de criptomonedas FTX, Sam Bankman-Fried (SBF), había ampliado su lista de acusaciones oficiales. En efecto, a las denuncias ya existentes se han añadido cargos de conspiración en la violación de las leyes antisoborno.
Según un informe de Reuters, SBF se declarará inocente de los últimos cargos, como ya hizo a principios de año.
SBF sigue declarándose inocente
SBF ya se declaró inocente a principios de este año durante una vista en Nueva York de ocho cargos, entre ellos el de fraude. Se arriesga a ir a la cárcel, pero el juicio no comenzará hasta octubre de este año. SBF ha dicho que nunca tuvo conocimiento de ninguna infracción en su crypto exchange.
Con la adición de las acusaciones de soborno a un funcionario del gobierno chino, SBF se enfrenta ahora a una acusación que consta de 13 cargos.
En la última acusación, SBF está acusado de intentar sobornar a uno o más funcionarios del gobierno chino con criptovalores de unos $40 millones. Con esta transacción, el ex director general de FTX quería asegurarse el acceso a múltiples cuentas congeladas.
Mientras SBF insiste en que él no tuvo nada que ver con nada, otros grandes nombres del derribado imperio ya han admitido su culpabilidad. Hace un tiempo, Caroline Ellison, ex consejera delegada de la investigación Alameda de Bankman-Fried, y Gary Wong, cofundador de FTX, ya se habían declarado culpables de varios cargos. Más recientemente, Nishad Singh, cofundador de FTX, se declaró culpable de otros seis delitos, entre ellos fraude, blanqueo de dinero y donaciones políticas ilegales.
El ex-CEO de FTX se enfrenta a restricciones cada vez mayores
SBF fue detenido por la policía en las Bahamas en diciembre y actualmente se encuentra en casa de sus padres a la espera de que comience el juicio. De hecho, fue puesto en libertad poco más de una semana después bajo fianza de $250 millones con la condición de permanecer en casa de sus padres. En cierto modo, parece que está abusando de la libertad actual que (todavía) tiene. Es por ello que, cada vez, se enfrenta a más restricciones. Por ejemplo, se ha podido leer recientemente que lo más probable es que pronto se le prohíba utilizar programas de chat en línea.