Hoy es un día muy especial. Sí, por fin se han aprobado los ETF de Bitcoin (BTC). Pero el 11 de enero también es muy especial por otra razón. Porque hoy hace exactamente 15 años que Hal Finney tuiteó un mensaje histórico al mundo. En efecto, el 11 de enero de 2009, tuiteó «Running Bitcoin», la primera señal de vida de algo que crecería hasta alcanzar proporciones astronómicas.
El pionero de Bitcoin
¿Quién es exactamente Hal Finney? Trabajó con el mítico Satoshi Nakamoto en el desarrollo de Bitcoin. Ya en 2004, el desarrollador de software desarrolló la primera forma de blockchain de prueba de trabajo, y cinco años después, en 2009, dirigió el programa Bitcoin por primera vez. El 11 de enero de 2009, tuiteó: «Dirigiendo Bitcoin».
Finney también fue el destinatario de la primera transacción de Bitcoin. De hecho, el 12 de enero de 2009, un día después del legendario tweet, Satoshi Nakamoto envió 10 BTC a Finney. Esta primera transacción fue la confirmación de que Bitcoin podía utilizarse para procesar transacciones, y fue el comienzo de la historia de Bitcoin y las criptomonedas.
Bitcoin ha recorrido un largo camino desde aquel histórico día de enero de 2009. Por desgracia, Finney nunca llegó a ver hasta dónde llegaría realmente su creación y la de Satoshi. De hecho, en 2009 le diagnosticaron la enfermedad muscular ELA, y el 28 de agosto de 2014 falleció a causa de ella a la edad de 58 años.
¿Quién es Satoshi?
El mundo de las criptomonedas debe literalmente todo a los esfuerzos de Hal Finney y Satoshi Nakamoto. Como probablemente sepan los lectores, la verdadera identidad de Satoshi Nakamoto sigue siendo un misterio. En uno de sus últimos mensajes en un foro Bitcoin, Finney opinó que la identidad de Satoshi también era un misterio para él.
Sin embargo, ¿era Finney secretamente Satoshi? Es una pregunta a la que desgraciadamente nunca obtendremos respuesta. Lo que es seguro es que Finney fue un pionero y un visionario. Creía que Bitcoin podía cambiar el mundo, y con la adopción de los ETF de Bitcoin, parece que Finney tenía razón.