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La Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC, por sus siglas en inglés) ha hecho recientemente un anuncio importante. Por ejemplo, la agencia gubernamental ha anunciado un periodo de comentarios públicos para las propuestas que ha recibido en relación con fondos cotizados en bolsa (ETF) de Ethereum (ETH).
Las propuestas han sido presentadas por varios gestores de activos, como Grayscale Investments, Fidelity y Bitwise. Durante un periodo de tres semanas, tendrán la oportunidad de hacer oír su voz presentando comentarios sobre la propuesta de modificación de las normas.
Las solicitudes son una consecuencia natural del gigantesco éxito que cosecharon los fondos de Bitcoin (BTC) desde principios de enero. Muchos inversores del sector crypto esperan que el equivalente a Ethereum también pueda proporcionar entradas masivas de capital, impulsando la cotización de la divisa digital.
¿Habrá un ETF de Ethereum?
Queda por ver si algún día veremos un fondo de Ethereum en Estados Unidos. El camino hacia la aceptación de los ETF de BTC no ha estado exento de dificultades. Análisis recientes también muestran reticencias entre otros expertos sobre la probabilidad de dicha aprobación por parte de la SEC.
En el centro de las dudas se encuentra la ambigüedad de la clasificación de ETH. A diferencia del caso de Bitcoin, con Ethereum se debate si el token debe clasificarse como valor.
Aplazada la decisión sobre el ETF de Ethereum
Tendremos que esperar hasta finales de mayo para conocer la decisión sobre el ETF Ethereum Futures Trust de Grayscale. Este aplazamiento se produce después de otro anterior. Refleja su cautela a la hora de regular el panorama de las criptomonedas.
La estrategia de Grayscale, que el conocido analista de criptomonedas James Seyffart describió como un «caballo de Troya», tiene como objetivo forzar la aprobación de su ETF de ETH al contado, un enfoque que anteriormente tuvo éxito con Bitcoin.
El retraso demuestra una vez más que la SEC se está tomando tranquilamente su tiempo para estudiar a fondo el producto financiero. Sin embargo, está generando frustración entre los inversores que anhelan claridad. Con la nueva fecha límite del 30 de mayo, la posibilidad de nuevos retrasos sigue siendo un importante punto de especulación y debate en la comunidad financiera.