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La Unión Europea aprobó la legislación sobre Mercados de Criptoactivos (MiCA) en abril. Fue un paso importante que puso a Europa en el mapa de la industria de criptomonedas, pero no estaba claro cuáles eran exactamente los requisitos para las empresas. Ahora, la Autoridad Bancaria Europea (ABE) y la Autoridad Europea de Valores y Mercados (AEVM) han cambiado esa situación.
Nuevos requisitos para las stablecoins
En un comunicado de prensa, la ABE anunció que las entidades financieras que emitan stablecoins deben gestionar los activos de los clientes de forma responsable y respetar sus derechos. Las empresas también deben mantener reservas suficientes para garantizar el valor de las stablecoins emitidas. Además, debe haber suficiente liquidez para garantizar la compra y venta de stablecoins.
Al mismo tiempo, la ABE subraya que dichas medidas son directrices por el momento y, por tanto, no son jurídicamente vinculantes. Sin embargo, esto sólo se aplicará hasta el 30 de junio de 2024, después de lo cual las medidas serán de hecho obligatorias por ley y no sólo directrices.
UE: la criptoindustria debe comportarse
Mientras tanto, la ESMA publicó un informe de 158 páginas en el que hacía propuestas para regular el resto de la criptoindustria. Por ejemplo, los exchanges, al igual que los emisores de stablecoins, deben gestionar los activos de los clientes de forma responsable. Esta medida tiene su origen en la caída de FTX. Esta plataforma de intercambio quebró el año pasado después de que se descubriera que el dinero de los clientes era reutilizado por la propia FTX para sus propios fines.
El sector tiene hasta el 20 de septiembre de este año para comentar los requisitos. Esto se incluirá en un informe que se publicará en octubre. Las normas definitivas deberían estar sobre la mesa a principios de 2024.
La ESMA también quiere saber de las empresas de cripto cuánto facturan, cuántos libros blancos tienen y si ellas mismas comercian con criptomonedas. Esto tendrá que ver con el conflicto de intereses mencionado anteriormente. De hecho, también tendrán que declarar si ellos mismos poseen información confidencial.
A principios del año que viene, también sabremos cuándo una criptodivisa tiene las características de un valor (léase: una acción o bono normal) y cómo se permite a las empresas extranjeras atender a los clientes en la UE.