Peter Schiff demanda a unservicio de investigación holandés
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El mes pasado se presentaron cargos en Puerto Rico contra, entre otros, el director general del Servicio de Inteligencia e Investigación Fiscal (FIOD). Se les acusa de poner ilegalmente en apuros financieros al banco de un empresario estadounidense.
Se reclaman daños por más de $50 millones de dólares
La demanda fue presentada por Peter Schiff, empresario estadounidense y propietario del Euro Pacific Bank. Según Schiff, el jefe de la FIOD, Niels Obbink, y sus colegas de la Dirección Conjunta de Ejecución Fiscal Global (J5) supuestamente conspiraron para difundir información difamatoria sobre él y su banco. Esto supuestamente causó al banco pérdidas millonarias. Los daños reclamados por Schiff ascienden a entre 49,8 y 56 millones de dólares.
El J5 desempeña un papel central en el caso. Esta asociación entre agencias de investigación fiscal de Holanda, Estados Unidos, Canadá, Gran Bretaña y Australia se creó en 2018 con el objetivo de combatir la evasión fiscal en todo el mundo. Una de sus operaciones clave fue la «Operación Atlantis», una investigación de varios años que puso al Euro Pacific Bank en el punto de mira.
Operación Atlantis
El FIOD compartió gran cantidad de información con el J5, que fue el punto de partida de una operación de un año de duración. Según los resultados de la investigación, Euro Pacific Bank estaba presuntamente implicado en blanqueo de capitales y evasión fiscal.
El Servicio de Impuestos Internos (IRS) intentó probar estas acusaciones, pero no lo consiguió. Como resultado, Schiff nunca fue citado formalmente. A pesar de la falta de procesamiento, el J5 organizó una rueda de prensa en la que presentó sus conclusiones sobre el banco. El mismo día, el regulador financiero de Puerto Rico, la Oficina del Comisionado de Instituciones Financieras (OCIF), exigió que el banco suspendiera sus operaciones por falta de fondos. Estos hechos condujeron finalmente a la liquidación del banco, un proceso que aún continúa años después.
Las acusaciones de blanqueo de dinero y evasión fiscal son injustificadas
Schiff rechaza firmemente las acusaciones de blanqueo de dinero y evasión fiscal. Sin embargo, reconoce que el banco tenía problemas de financiación. Para remediarlo, él mismo depositó 2 millones de dólares y tenía previsto invertir otros 7 millones. Además, había encontrado un comprador dispuesto a hacerse cargo del banco en dificultades.
Según Schiff, el J5, incluido el IRS, intentó deliberadamente dañar su reputación. Según él, la rueda de prensa sirvió de plataforma global para acusar falsamente a su banco y presentar la fallida investigación como un éxito. Sostiene que, tras años de investigación, sigue sin haber pruebas de las acusaciones iniciales.
El propietario del banco demanda a varias partes
Además del director de la FIOD y algunos colegas, Schiff también ha nombrado a otras partes en su acusación. Entre los acusados figuran el IRS, la OCIF, dos periódicos y algunos periodistas. Los periódicos en cuestión son «The New York Times» de Estados Unidos y «The Age» de Australia. Schiff los acusa de injerencia ilícita en sus actividades empresariales.
El empresario también afirma que funcionarios del IRS contribuyeron activamente al contenido del comunicado de prensa de la OCIF. Así se desprende de los correos electrónicos que obtuvo a través de un recurso a la Ley de Libertad de Información. Con su acusación, Schiff espera que se haga justicia después de todos estos años. Dada su determinación, parece seguro que este caso seguirá adelante.