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El 1 de enero de 2022, Kazajistán introdujo impuestos sobre la minería de criptomonedas basados en el consumo de electricidad de las entidades mineras. La ley entró en vigor en medio de una creciente frustración en el país por el uso infravalorado de la red eléctrica nacional por parte de los mineros de criptomonedas. Según los medios de comunicación locales, el gobierno de Kazajistán habría recibido un total de 3.070 millones de tenges (unos $7 millones) en impuestos de los mineros de cryptos en 2022.
Impuestos a la minería de criptomonedas en Kazajistán
Los tipos impositivos para los mineros de criptomonedas vienen determinados por los precios de la electricidad. Cuanto más barata sea la electricidad, más impuestos tendrán que pagar las entidades mineras. También se fomenta el uso de energía verde reduciendo significativamente el impuesto sobre ella.
Los datos preliminares del gobierno para 2023 muestran que el impuesto recaudado en el primer trimestre es muy inferior al de los tres primeros meses de 2022. De hecho, en 2022, la cantidad total ascendió a 652 millones de tenges (alrededor de $1,5 millones), mientras que el total de este año ha sido de 240 millones de tenges (más de $541.000).
Descenso de la minería de Bitcoin en el país
Kazajistán es uno de los mayores centros de minería de Bitcoin (BTC) del mundo. En 2021, muchos mineros de Bitcoin se trasladaron a Kazajistán, en parte debido a la electricidad barata del país. Algunas estimaciones indican que en noviembre de 2021, más de 87.849 equipos de minería se habían trasladado a la región tras las medidas enérgicas de China contra la minería de Bitcoin.
Sin embargo, a principios de año se podía leer en las noticias sobre Bitcoin que muchos mineros del país centroasiático habían cerrado. De hecho, la cuota de Kazajistán en la potencia informática total de la red Bitcoin cayó del 18% al 6,4% entre enero de 2022 y enero de 2023. Como efecto secundario positivo, la cuota de energía limpia para minar BTC aumentó un 2,9%. De hecho, las emisiones totales equivalentes de CO2 disminuyeron nada menos que un 10%.
Este fuerte descenso del número de mineros de Bitcoin es, por tanto, la razón más obvia del descenso de los ingresos fiscales de los mineros de criptomonedas en el primer trimestre de este año.