Sam Bankman-Fried (SBF), el «rey de las criptomonedas» tras la debacle del FTX, ha pasado rápidamente de ser un favorito a un hombre odiado por muchos. SBF tiene ahora un montón de cargos pendiendo sobre su cabeza, pero ayer se anunció que el Departamento de Justicia no le procesaría por hacer donaciones políticas de forma ilegal en Estados Unidos. La comunidad criptográfica no está de acuerdo y exige que SBF sea procesado hasta la última letra de la ley.
El destino del «rey de las criptomonedas»
La quiebra de FTX en noviembre de 2022, valorada entonces en $30.000 millones, dejó un agujero negro de $8.000 millones en activos de clientes. Pronto quedó claro que la desaparición de FTX era culpa de SBF y sus consortes. Naturalmente, esto provocó que la comunidad criptográfica se volviera contra él.
Así que, tras la declaración de culpabilidad de SBF en noviembre por cargos de fraude y blanqueo de dinero, los fiscales han decidido no celebrar un segundo juicio. Los seis cargos restantes incluyen conspiración para sobornar y dirigir una empresa de transacciones monetarias no registrada. Esta decisión de no celebrar un segundo juicio, bajo el pretexto del «gran interés público» por una conclusión rápida, ha dejado a la comunidad criptográfica alborotada. Esta decisión no encuentra apoyo entre la comunidad crypto. Por ejemplo, el director jurídico de Coinbase, Paul Grewal, afirma lo siguiente en X:
«El interés público en una acusación pública casi siempre importa. Las acusaciones sobre financiación de campañas encabezan esta lista. Qué políticos y otros sabían qué y cuándo son preguntas críticas que merecen respuestas».
🇺🇸 #SBF Sam Bankman-Fried lost $8bn of #FTX client money.
He donated $100m in stolen customer funds to US politicians.
The US Government are prosecuting his fraud, but dropping his political campaign finance violations & likely won’t clawback the politicians for victims.
— Simon Dixon (@SimonDixonTwitt) December 30, 2023
FTX y las secuelas
El final del caso FTX pone de relieve un momento crucial en la regulación crypto y la justicia. Mientras Bankman-Fried espera su veredicto, la cuestión más amplia sigue siendo la regulación futura de las criptodivisas y las responsabilidades de sus dirigentes.
El resultado de este caso afectará no sólo a los individuos implicados, sino también a la forma en que el mundo ve la regulación crypto. Es un recordatorio de la importancia de la transparencia, la ética y la necesidad de un marco jurídico sólido en el mundo en rápida evolución de las criptomonedas.