La red de criptomonedas Solana (SOL) está actualmente inundada de una oleada de nuevos tokens. Los operadores buscan el próximo gran éxito, inspirados por el éxito de Bonk (BONK) y la recuperación del ecosistema en general.
Récord de tokens para Solana
Según datos de Solscan, la friolera de 72.202 nuevos tokens han aparecido en la red Solana en las últimas dos semanas. Este notable aumento es más de 71 veces superior al número de tokens creados durante un periodo similar en octubre. Las estadísticas diarias de creación de nuevos tokens en Solana son actualmente unas cuatro veces mayores que nunca.
A pesar del impresionante progreso del ecosistema de Solana, el repentino aumento de la creación de tokens plantea dudas sobre el crecimiento orgánico de la red. Los aumentos de Solana (SOL), Solana NFTs, Solana memecoins, entre otros, quizá hayan eclipsado este fenómeno.
Slorg, investigador seudónimo de blockchain y jefe de proyecto de la herramienta Solana NFT Sol Incinerator, destaca el misterio que rodea a este aumento a través de una publicación en X: «Quizá puedas suponer que se duplica o triplica (la creación de nuevos tokens SPL) debido a un aumento de la actividad general. Pero, ¿cómo explicas los otros 6.000 tokens diarios?».
El clásico pump & dump
El fenómeno salió a la luz cuando apareció un token falso de Sol Incinerator en Solana. Rastreando las transacciones en la cadena, Slorg descubrió que el defraudador había creado docenas de nuevos tokens SOL y los había bombeado y volcado en cuestión de minutos. Slorg señala que muchos de los tokens lanzados diariamente parecen estar diseñados según el principio de «30 al día».
«Estos tokens están diseñados para atraer a las personas que no pierden de vista la pestaña ‘recientes’ de Birdeye», en referencia a la popular plataforma de datos criptográficos. «Los rastreadores de carteras han descubierto que una persona ha lanzado 300 tokens en una semana», dijo Slorg la semana pasada.
«Mucha gente me dice: ‘Éste es todo el sentido de las criptomonedas'», dijo un disgustado Slorg. «Y es algo descorazonador, porque creo que podríamos ser mucho más».