La naturaleza descentralizada del Bitcoin (BTC) permite a los usuarios convertirse en su propio banco. Permite a los individuos poseer y controlar totalmente sus activos. Una desventaja de esta característica fundamental de Bitcoin es que los usuarios son responsables de asegurar sus propios fondos. La trágica historia de John, un estudiante promedio, demuestra que un pequeño error puede provocar pérdidas financieras desastrosas.
El sueño de Bitcoin se desvaneció por una bolsa olvidada
John es un estudiante corriente que se sumergió en el mundo de Bitcoin en 2012, apenas 3 años después del inicio de la red. Por aquel entonces, tomó la decisión de invertir una modesta cantidad en la moneda descentralizada, adquiriendo un total de 10 BTC.
Durante 2012, el precio del bitcoin se movió entre aproximadamente $4,50 y $13,70. Esto significa que la inversión total de John osciló entre $45 y $137.
Con la impresionante trayectoria que siguió el precio del bitcoin en los años siguientes, su inversión creció hasta alcanzar un tamaño inmenso en 2017. Mientras su futuro financiero brillaba, un momento de falta de atención causó un revés inesperado.
John había guardado sus claves privadas, o los códigos secretos que dan acceso a sus criptomonedas, en una memoria USB. La tragedia de John comenzó con una simple bolsa que olvidó mientras iba de un sitio a otro. De repente, la posibilidad de acceder a sus 10 BTC se esfumó cuando se dio cuenta de que su memoria USB estaba en esa bolsa.
Con el precio del bitcoin en torno a los $10.000 en aquel momento, el pequeño olvido de John le supuso una pérdida de unos $100.000. Con un precio actual de $44.000, sus BTC valdrían $440.000.
Lecciones clave sobre criptomonedas
La historia de John pone de relieve el alto grado de responsabilidad que conlleva «ser tu propio banco». No existe una autoridad central a la que los usuarios puedan recurrir en caso de problemas. Cada uno es responsable de asegurar sus propias claves privadas, lo que conlleva riesgos.
El incidente pone de manifiesto la necesidad de contar con estrategias de copia de seguridad fiables para los monederos de criptomonedas. Hacer copias redundantes de las claves privadas y almacenarlas en lugares seguros garantiza que, aunque se pierda una copia, los fondos sigan siendo accesibles y recuperables.
También subraya la importancia del manejo de los elementos físicos, como las memorias USB o los monederos físicos, en los que se almacenan los fondos. Perder las claves privadas conlleva ahora pérdidas financieras irreparables, y no todos los criptoinversores son igual de conscientes de ello.