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A principios de este mes, un grupo de hackers filtró toda la base de datos de usuarios del proveedor de wallets de Bitcoin Chivo. Ahora, un tiempo después, parece que el grupo ha vuelto a atacar. En esta ocasión, se ha filtrado información clave sobre el monedero Chivo y sus cajeros automáticos a través de un foro de piratas informáticos.
La filtración del monedero bitcoin Chivo puede tener graves consecuencias
En efecto, el 23 de abril, el grupo de hackers «CiberInteligenciaSV» divulgó parte del código de programación de la criptocartera Chivo . Lo publicó en el foro de hacking «BreachForums».
También se compartió otro archivo que contenía información sobre el código de programación y los datos VPN de los cajeros automáticos Chivo. Estos cajeros son utilizados por residentes de El Salvador para retirar Bitcoins (BTC) de sus wallets Chivo.
Importante filtración de datos personales
Antes de la reciente filtración, el grupo de hackers ya había compartido una gran cantidad de datos personales con el público a principios de este mes.
A través de un post en su página de X fechado el 22 de abril, el proyecto local de ciberseguridad «VenariX» ya advertía de una próxima filtración. De hecho, en el canal de Telegram del grupo de hackers ya se hablaba del plan para revelar parte del código de programación que hay detrás de Chivo.
BTC como medio de pago autorizado
El Salvador fue, en septiembre de 2021, el primer país del mundo en declarar a Bitcoin como moneda de curso legal. Esto hizo posible realizar pagos en el país utilizando la moneda digital.
En su momento, el gobierno de El Salvador promocionó la crypto wallet de Chivo como la wallet de Bitcoin oficial para sus residentes. Esto se debió en parte al hecho de que el proveedor permitía retirar Bitcoins de estas wallets en cajeros automáticos específicos. A pesar de los difíciles comienzos de la cartera Chivo, en los que los usuarios sufrieron muchos mensajes de error, actualmente es utilizada por muchos residentes.
Sobre los hackeos del grupo de hackers, el gobierno de El Salvador todavía no ha hecho ninguna declaración. Como resultado, parece haber una creciente confusión por parte de la industria criptográfica sobre la situación actual.