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La enorme exchange de criptomonedas Binance lleva tiempo intentando hacerse con los activos de Voyager, que actualmente se encuentra en quiebra. Se han superado los obstáculos necesarios, pero parece que vuelven a surgir problemas. El Department of Justice (DOJ), el Departamento de Justicia de Estados Unidos, quiere poner fin a la absorción.
Otro obstáculo para Binance
Según el DOJ, la adquisición daría lugar a una situación en la que Voyager y su personal ya no podrían ser considerados responsables de delitos pasados.
«Nada en las leyes concursales autoriza a los tribunales a excluir a las partes de responsabilidad por delitos pasados y futuros».
En una declaración el martes, el DOJ dijo que detendría la adquisición hasta que se aclararan las dudas legales.
Hace unas semanas, el organismo de vigilancia financiera estadounidense, la Comisión de Seguridad e Intercambio (SEC), también se opuso a la adquisición. Según la SEC, parte de la adquisición, los tokens VGX, se consideran un valor no registrado.
En el pleito entre Binance y la SEC, ésta no dio la razón al juez. El juez consideró que las objeciones de la SEC no superaban la importancia de la adquisición para los acreedores.
El DOJ está ocupado
Las autoridades financieras estadounidenses están teniendo una semana ajetreada. El martes se anunció que el DOJ ha iniciado una investigación oficial sobre el Silicon Valley Bank (SVB). El banco cerró sus puertas la semana pasada tras anunciarse que tenía graves problemas de liquidez. Los sorprendidos inversores retiraron masivamente su capital.
Ahora parece que muchas cosas han ido mal entre bastidores en el banco. Por ejemplo, los ejecutivos del banco habrían sido conscientes de los problemas y lo habrían ocultado. Además, los ejecutivos vendieron un montón de acciones de su empresa en el periodo previo a la quiebra.
En conjunto, motivo suficiente para que el DOJ investigue cómo pudieron salir las cosas tan mal, y cuál fue el papel de los ejecutivos.